El Instituto Nacional Electoral (INE) ha asegurado la certeza del proceso de conteo rápido de votos, crucial para proporcionar estimaciones rápidas y científicamente fundamentadas sobre los resultados de las elecciones. Con un margen de error histórico del 1.5%, este método se ha consolidado como una herramienta confiable para presentar tendencias de votación recibidas por coaliciones y partidos.
En una conferencia de prensa, la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, junto con consejeras electorales y especialistas, detallaron el proceso que se llevará a cabo el 2 de junio. Se anunció que mañana se realizará el último simulacro del método, utilizando muestras representativas de los resultados oficiales, lo que permitirá presentar tendencias de votación con alta precisión.
En caso de una competencia cerrada, se analizará el momento adecuado para difundir los números de una muestra con estimaciones estabilizadas, lo cual podría ocurrir alrededor de las 20 horas. El método se basa en el análisis de mil casillas seleccionadas aleatoriamente, asegurando la representatividad de los resultados a nivel nacional.
Los especialistas encargados del conteo rápido trabajan de manera separada por razones de seguridad, y las estimaciones se presentarán en intervalos para brindar mayor transparencia y confianza a los votantes. Este enfoque científico, desarrollado hace más de 20 años, promueve la certeza, la transparencia y la confianza en el resultado electoral.
El equipo de especialistas realizará mediciones con muestras aleatorias de casillas, cuya definición se establecerá antes del día de las elecciones. Aunque los resultados del conteo rápido no son definitivos, proporcionarán una indicación confiable de los resultados finales, contribuyendo así a la integridad del proceso electoral.
En resumen, el INE ha reafirmado su compromiso de garantizar la certeza del conteo rápido, un proceso fundamental para brindar estimaciones precisas y confiables sobre los resultados de las elecciones. Con un margen de error del 1.5% y un enfoque científico riguroso, este método desempeñará un papel crucial en las próximas elecciones, asegurando la confianza del público en el proceso democrático.
